19/11/07

Momento para la nostalgia


Recordando los viejos tiempos, me he encontrado con las figuras de esta serie de dibujos animados. A pesar de ser una americanada en toda regla, sólo con ver la bandera de los EE.UU. y el eslogan de "A Real American Hero" se puede llegar a esta conclusión; la verdad es que esperaba ansioso a que llegara el fin de semana para sentarme delante de la tele a primera hora de las mañanas de los sábados y los domingos para ver esa serie.

La gente de mi quinta recordará que lo mejor de ésta y otras series, no eran tanto los personajes, las tramas o demás motivos para seguir una historia, sino que lo mejor de todas ellas era el doblaje sudamericano. Los dibujos de ahora ya no tienen gracia, no tienen expresiones como "¡Recórcholis!" o "¡Padeserás mi furia!" en sus guiones. Ya no tratan temas como la lucha contra el mal, la lealtad, la amistad, el sacrificio por conseguir llevar a cabo buenas causas.

Los acusaban de ser dibujos violentos por aparecer personajes con armas y estar luchando entre ellos. Pero más violento me resulta ahora encender la televisión a las cinco de la tarde y encontrarme con programas sensacionalistas en donde los contertulios se dedican a gritar, insultar y difamar a todo el mundo.

Se hecha de menos ver ésta y otras muchas más series en los canales de televisión. La verdad es que me han alegrado muchas mañanas del fin de semana; y las que me alegrarían si volvieran a emitirlas.

Se despide un hombre que no quiere olvidar que una vez fue niño. O un niño que le ha tocado hacerse hombre. Esto es como el tema de la botella medio llena o medio vacía, depende de cómo la quieras mirar.

Trabajo nuevo

Camino por pasillos que no conozco, pero no me siento perdido.

Viajo por parajes que nunca he visto y no me sorprendo al verlos.

Duermo en camas prestadas en las que mi cuerpo se acomoda sin problemas.

Veo una sonrisa en mi cara sin la más mínima seña de que sea una sonrisa cínica.

Mi armario se reduce a una maleta y una mochila. No echo en falta más posesión que la de llevar conmigo mi guitarra.

Mañana me despertaré en un sitio nuevo, en una cama que no es la mía. En una habitación extraña en la que me siento mejor que en casa; donde existe la independencia, el espacio, el silencio, la calma.

By Un Fulano Que Escribe.